
Con la plantilla de fútbol cerrada y el Mundial en los telediarios, el ser superior ha recordado que el club tiene otra sección. Aquello de la canasta y las camisetas sin mangas. Una sección a la que desde junio no había dedicado ni tiempo ni dinero. Al contrario, premió la mejor temporada en ingresos de su historia con una nueva reducción presupuestaria, que cristalizó en fichajes apañados pero que no dan para ilusionarse. Con sólo un poco más se hubiese alicatado una plantilla redonda y de garantías, pero la prioridad no era deportiva sino económica: minimizar pérdidas, una odisea en la élite del baloncesto FIBA. Pero date que alguien ha debido chivarle a Flopper que, dados los movimientos de verano, el millonario Barcelona parece favorito al título Euroliga, que se dirimirá en Madrid. Más vale tarde que nunca, sí. Pero el cambio de actitud del presidente, aunque bienvenido, no debe impedirnos ver el bosque. Levantar la Novena en el Palacio no era motivación suficiente para un pequeño esfuerzo de 1 o 2 millones en un club con 600 de presupuesto. Sin embargo, sí es motivación el miedo a que el eterno rival se corone en nuestro feudo. Resumiendo, que la racanería de Florentino con el baloncesto nos hace ir a rebufo del Barca. Perseguidores. El resto es engañarse.
Dicho lo cual, hablemos de nombres. El club no descarta la rescisión de Laso y la incorporación de Katsikaris una vez termine el Mundial. El dinero ha dejado de ser problema, y así la indemnización a Laso no será un impedimento si se apuesta por el griego. Además, se busca un interior de calidad, preferiblemente un cuatro, para poder dosificar a Felipe y Nocioni. Además, este segundo podría jugar minutos de alero, donde resulta más diferencial. La lógica dice que el sacrificado sería Slaughter (con mucho el más limitado de los cinco interiores), que quedaría como 13º jugador de la plantilla, pues cortarle recién renovado tampoco tiene sentido. No ha empezado la temporada y parece que en el club ya se han dado cuenta de la cagada que fue renovarle, por dos años, nada menos.
Lógicamente es tardísimo para salir al mercado, pero siempre se puede rascar algo si hay dinero, voluntad y un poco de imaginación. Para empezar, el presidente debe sacudirse los prejuicios futboleros, en septiembre no quedan apellidos de telediario disponibles. La Ñ y eso. El mercado europeo está cerrado, salvo desembolso de siete dígitos en concepto de traspaso. Pienso en Derrick Brown o Dubljevic. Harto improbable, así que toca abrir el perímetro de búsqueda: descartes NBA o ligas asiáticas. El primero que sonó fue Luis Scola, desestimado de inmediato, al menos para este curso, pues tiene contrato NBA en vigor.
Mucho más factible es el center Hamed Haddadi (2.18m, 29 años), pues actualmente milita en el Mahman Teherán de la liga iraní. El jugador se ha dejado querer en declaraciones públicas. Sus medias en el Mundial arrojan pocas dudas sobre su posible impacto en Europa: 18.8 puntos y 11.4 rebotes. Además, una operación de marketing muy del gusto de Florentino. El Madrid se metería en el bolsillo un mercado de 80 millones de habitantes, generando una onda expansiva que también beneficiaría al fútbol. Haddadi tiene dos pegas: es extracomunitario y pívot nato. Los canones dicen que un ala-pívot puede jugar de center, pero no así viceversa. Y en principio el puesto de center lo tenemos bien cubierto con Bourousis (excelso, por cierto, en la primera fase del Mundial) y con Mejri, que en la recta final del curso pasado enseñó destellos de un gran impacto en ambos aros y del que cabe esperar un step-ahead este curso con la llegada de Tabak, reconocido entrenador de pívots, como demostró con Felipe.
En las últimas horas ha sido ofrecido al Madrid el serbio Miroslav Raduljica (2.13m, 26 años), también pívot nato, que está sin equipo tras ser cortado por los Clippers. Tiene clase, ha brillado con Serbia, tanto en los partidos de preparación como ya en el Mundial (14.2pts y 4.8 rebs), demostrando una importante facilidad para sumar estadística. Ahora bien, no pega ni con cola en el sistema Laso, pues no es nada atlético y tiene un carácter complicado. El que sí cuadraría sería Gustavo Ayón, cuatro y medio que también anda sin equipo. El Barca guarda sus derechos federativos para Europa (no confundir con derecho de tanteo), pero el jugador mostró en su día escaso interés por vestir de azulgrana (es merengón hasta la médula) y ahora no tiene cabida en la plantilla de Pascual. Los derechos que el Barca compró a Fuenlabrada no valen nada si no se materializan y el Madrid podría ofrecer un buen pellizco a cambio de ese papel mojado. No es que al Barca le haga falta el dinero, que en ese capítulo ha demostrado que va sobrado, pero tampoco escuece un ingreso, de digamos 500k a 750k, que suavice el palo de indemnización a Lorbek y además justifique de cara a su opinión pública el reforzar a un rival directo. Un poco de comprensión, coño, que nosotros les regalamos en su día a Tomic…
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