Panathinaikos era una ‘final’ y faltaba Doncic, baja dos semanas, alguien debía dar un paso al frente y fue a darlo uno de los menos esperados, el mosquetero Causeur, rompiendo un ciclo de cuarto menguante, tras un esperanzador inicio de temporada. Tan bien jugó el francés, que obligó a Laso a cambiar la rotación, Carroll chupó banquillo y se hizo buena la canción de Bowie: We can be heroes, just for one day. Ejerció Causeur de Luka, diría que de los mejores partidos de un jugador del Madrid esta temporada, 26 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias. Sus penetraciones por la izquierda fueron un martillo (8/10), alguien en Atenas no trajo hechos lo deberes de scouting, para rebote de Xavipas. Con semejante actuación, dada la importancia clasificatoria, diría que Causeur justifica como la mitad de su salario del curso, que tampoco es tan alto.
Pero no estuvo solo, el Madrid vivió de otras dos destacadas actuaciones individuales (Facu y Tavares) y, por qué no decirlo, de una decepcionante versión de PAO, con un Calathes ridículo, Lojeski en modo exjugador y Gist secado por el doctor Gigante Verde, que volvió a pasar consulta. Enganchan los griegos su quinta derrota consecutiva a domicilio, quedando a una victoria más average. Si el Madrid cumple, se jugará el deseado cuarto puesto en la visita de Zalgiris. Ya avisamos la semana pasada que la derrota ante Fenerbahce era más dolorosa por la forma que costosa en la clasificación.
.@RMBaloncesto breaks its tie with @paobcgr behind a huge @FCauseur1 performance .
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— EuroLeague (@EuroLeague) 8 de marzo de 2018
Campazzo cuajó un partido superlativo una demostración de madurez y personalidad, que por otra parte tampoco debe ya sorprender dada su evolución del último mes. Valoración 28 defendido por el supuesto mejor base puro de la competición, ni una sola pérdida de balón en 32 minutos en pista. Y los suyos no son minutos de mariposear, de subir la pista y esconderse en la esquina, no, son de driblar, asistir y dirigir a tiempo completo. Es canchero y muy argentino, se le nota disfrutar en pista en partidos así, sentirse protagonista, tomar decisiones. Su step ahead, en pleno nudo de la campaña, es una realidad incontestable. Si la temporada fuese un videojuego Sega diríamos que ha pasado a la siguiente pantalla, el next level. Siendo reserva es mejor que unos cuantos bases titulares de la Euroliga. Este Facu más Llull bien pueden el curso que viene enjuagar en gran medida el impacto de la salida de Doncic. Quiero pensar que la renovación del argentino está apalabrada, sino ya están tardando…

El tercer pilar blanco fue Tavares que, por primera vez en mes y medio, vuelve a exportar a Euroliga su nivel de dominio ACB. Retrató a sus pares, Gist y Singleton, y fue clave en ese pobre 43% de dos de Panathinaikos. Además, 7 rebotes, 3 tapones y 6 canastas, no todas mates tras asistencia, como acostumbra, sino que esta vez exhibió un ganchito de derechas bien curiosón, tan ortopédico como indefendible. El domingo viaja el Madrid a Barcelona, seguramente pierda y, advierto, no pasará nada, por muy de azulgrana que vista el rival. Tan poco se juegan los blancos que casi le pediría a Laso que diese descanso a Facu… si no fuese porque me jodería la Supermanager.
Mezquino e injusto es cargar tintas sobre un muchacho que cumplió el miércoles 19 años, como si su labor fuese justificarse ante los piperos por las expectativas que levantan los titulares de Marca sobre su puesto en el Draft. Paremos un momento y reflexionemos, que estoy leyendo mucha gilipollez en Twitter, que la frustración de una derrota (relativamente previsible) no nuble el juicio. No es Doncic sino Llull, recordemos, el segundo mejor clutch player de Europa tras Spanoulis, quien está llamado a jugarse las bolas calientes en este roster. Si al chaval le ha caído el marrón y estamos ahora hablando de él es porque nadie ha dado un paso al frente y por la racanería del club.
El
Uno con los años asume que la visita del Madrid a Moscú es poco menos que turística, un selfie en la Plaza Roja, una matrioshka en el aeropuerto y Bill Murray retransmitiendo desde Punxsutawney. Una década hace de la última victoria blanca en pista de CSKA, 
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