Salió el Madrid relajado, como de costumbre. Un mal hábito de la era Laso que no resulta problema en ACB contra la mayoría de rivales, ni siquiera a domicilio (Euroliga es otra historia). En Fuenlabrada la desventaja en el primer acto alcanzó picos de doble dígito hasta que Chacho (13pts + 5as), Rudolf (11pts +8 rebs) y Mirlo (15pts) se pusieron de faena. El resto es conocido: 88 puntos y valoración 109 del equipo, guión de ese 21-1 en ACB.
Lo mismo nos apresuramos al colgar a Llull el cartel de ‘en crisis’. Que sí, que en algún ataque se nos aparecen fantasmas pasados con esos estridentes tiros salvapatria, pero no es fácil rendir como un reloj haciendo la goma entre dos puestos, sin olvidar además que el otro base atraviesa pico de forma. Aún así, Llull promedia 17,5 puntos en los últimos 5 partidos ACB, con un 61% en tiros de campo. Su particular crisis es de acierto en triples en Euroliga: 19% (8 de 42) en el Top-16. Pero de esa no tiene la exclusiva: Rudy firma un 24% en triples en el Top-16 (11 de 45). Chacho y Carroll mantienen el acierto exterior, pero alguna escopeta habría que sumar cuando se corte el bacalao.
Los dos últimos partidos han visto el regreso de Pocius tras una baja más larga de lo esperado. 23 minutos en pista esta semana, lejos de un estado de forma y ritmo como para echar una mano. Hettsheimeir, digno en la caraja-encuentro del viernes contra el Alba, volvió por sus fueros de mediocridad: valoración -1 en 18 minutos. En ningún caso seguirá tras el verano. Ahora bien, sabemos de uno que no será el sustituto: Saer Sené. Si en algún momento, enajenados por fogonazos estadísticos, se nos cruzó por la cabeza su nombre como posible center para el Madrid, mejor olvidarlo, evidentemente no pasa el corte.
Posdata: Las alemanas Dr Oetker han ganado la encuesta sobre la pizza preferida para ver basket, con algo más del 30% de los votos. Tarradellas y Telepizza completan el podio.
