Lo que implica el portazo de Lorenzo Brown

Era la opción más evidente para que el Real Madrid reforzase el puesto de base en verano. No porque lo hubiese publicado cierto portal piscinero, cuyo nombre os ahorraré, el mismo que dio la ‘primicia’ del fichaje de Shanon Evans por el Madrid en noviembre… No, Lorenzo Brown era la opción evidente por dos ingredientes.

El primero es que, a pesar de tener otro año garantizado en Tel Aviv, su contrato parece que incluía una cláusula de escape a equipos ACB en verano. Además, era un fichaje muy del estilo Juan Carlos Sánchez, con toquecito tribunero: Lorenzo fue el héroe improbable de la selección en el último Eurobasket y resulta muy vistoso al boxscore. Pero esa opción se ha cerrado de un portazo esta semana, con su ampliación de contrato por Maccabi hasta 2026. El único motivo para renovar a un jugador veterano (32) que no termina contrato la temporada en curso es certidumbre = clausulazo a cambio de más años. Una fórmula que, por cierto, conocemos bien en Goya.

Casilla de salida

Con Lorenzo fuera de la ecuación el Madrid vuelve a la casilla de salida: Campazzo o parches. La opción del argentino nos despierta una pereza infinita a estas alturas, la perspectiva de regresar a la guerra de filtraciones agente-club… Pero, si conseguimos abstraernos de esa lógica pereza, recuperar a Facu sería la opción más razonable desde un punto de vista deportivo e institucional. De lejos el mejor uno fichable en mercado Euroliga, dada la cláusula de salida testimonial (50k) que se dejó para este verano en su contrato con el Estrella Roja.

Sigue teniendo casa en la ciudad, amigos en el vestuario, habla el idioma y conoce a Chus Mateo. Además, el Madrid es un proyecto ganador, un contender claro. Estos factores ya estaban en diciembre, pensaréis, cuando eligió Estrella Roja. Si, pero este verano se sumarán dos factores financieros que tienen más peso que el derecho de tanteo perdido.

1.- Que el primer año de vuelta a España Campazzo podrá (ahora sí) acogerse al tipo tributario reducido, 24% IRPF, lo que enjuaga buena parte de la desventaja fiscal del Madrid respecto a clubes del Este.

2.- Que el RM en julio libera bastante masa salarial con la marcha de Randolph, la probable retirada de Rudy y las posibles salidas de Chacho o Goss, que terminan ambos contrato. Nada que ver con el overbooking exterior de este curso, que complicaba el fichaje-encaje de Campazzo a temporada comenzada.

¿Cuánto pesa el desencuentro personal entre Campazzo y JCS, tanto como para no darse otra oportunidad y sentarse a negociar al menos? Lo mismo es ver el vaso medio lleno, pero las declaraciones de esta semana del jugador me suenan a puerta entreabierta, al menos por su parte: «Mi prioridad (en diciembre) era recalar en el Madrid. Negociamos pero no alcanzamos un acuerdo, lo cual no significa nada. Les estoy agradecido por darme la oportunidad de debutar la Euroliga y permitirme ir a la NBA».

Alternativas

Pero no siendo Lorenzo, si tampoco fuese Facu, las opciones realistas se limitan sobremanera y tampoco resultan demasiado ilusionantes, al menos como ‘base titular’, en algunos casos dudo que mejorasen lo presente, que algunos lo tienen tan denostado. En todo caso, aquí lanzo algunos nombres que se me ocurren. Y no dejéis de sugerir los vuestros en los comentarios.

> Luca Vildoza. Parece físicamente recuperado, tiene talento como para llegar a ser élite y está rindiendo a buen nivel en Belgrado, tras una época de hibernación por lesiones. Al igual que Facu, tiene si no me equivoco una cláusula de salida testimonial este verano. Dos contras: es más combo que director y habría que negociar tanteo con Baskonia, echadle un sobrecoste a la operación como de 500k.

> Dante Exum. Su segundo año de contrato con Partizan (el próximo) es opcional y el FCB no le metió en tanteo. Pieza clave de la estupenda temporada del equipo serbio, sexto clasificado de la Euroliga según escribo estas líneas, y tiene margen de mejora. Le veo como posible recambio de Goss en perfil de base físico-defensivo, ahora bien, si se busca un generador de élite, Exum no lo es.

> Maodo Lo. Igual que Vildoza, le veo más combo que base, es decir, con más puntos en las manos que asistencias. No está cuajando su mejor temporada, lastrado por lesiones (11 puntos y 3.2 asistencias per game), pero igual me parece un talento notable. Tiene 30 años y termina contrato, aunque no sé cómo de factible es sacar de su país a un jugador alemán de un equipo Euroliga. En el caso de Maodo Lo, nunca ha jugado fuera de Alemania.

> Keenan Evans. Base titular de Zalgiris y ex Maccabi, estaba siendo una de las sensaciones de la temporada, con promedios de 16 puntos, 4 asistencias y 17.5 de valoración. Pero se lesionó de gravedad el día de Reyes, tendón de Aquiles. Es joven, tiene 26 años y podría recuperar el nivel a su regreso, que calcularía para comienzos de la próxima temporada. Pero, siendo realistas, ficharle en estas condiciones sería un riesgo importante.

> Hay otros bases Euroliga potables que terminan contrato en verano, quizá no titulares para un Madrid pero que igual los menciono para tenerlos en mente: Shabazz Napier (Milán) y Corey Walden (Múnich). El mercado USA siempre ofrece talento, pero un americano sin experiencia FIBA es por definición un melón sin abrir, y tampoco creo que un contender a la Euroliga esté para esas lides. Por cierto, que en la NBA tenemos a Leandro Bolmaro, en el último año de contrato garantizado y con mucha pinta de (tener que) regresar a Europa. No está sujeto a derecho de tanteo por el Barca, pero ya se ha dejado querer.

> Si bajamos a opciones Eurocup encontramos apuestas a medio plazo. Y pienso principalmente en Yago dos Santos, que está brillando en Ulm, compañero de Juan Núñez. 23 años, más explosivo que una traca en fallas, un potencial importante: 12.5 puntos y 6 asistencias de media en Eurocup, 18 de valoración. Y mirad lo que os digo, no perdáis la pista a Andrés Feliz, del Joventut, 25 años, creo que dará el salto a Euroliga más pronto que tarde.

Algunos aficionados me han mencionado nombres que sencillamente no considero viables, y que por eso no incluyo en la lista. Por ejemplo Darius Thompson (Baskonia) y Thomas Walkup (Olympiakos), que tienen contrato garantizado el año que viene y rol importante en sus respectivos equipos. Tampoco me parece factible Chris Jones, que firmó solo un año pero al que Valencia incluirá con toda seguridad en el tanteo y sabemos que 1) el club taronja es un vendedor durísimo y que 2) la política del Madrid de basket es eludir la pugna abierta por un jugador.

Y a pesar de todo, líderes en solitario

Si a algo nos está obligando este curso es a aparcar prejuicios y relativizar la derrota, por mucho que cueste a una parroquia tan exigente como la blanca, acostumbrada a hacer un mundo y pedir cabezas con cualquier pinchazo. Asumamos que los tiempos de las fases regulares cortas y casi impolutas han quedado atrás. El calendario de un equipo Euroliga tiene ahora 80 encuentros y semanas de tres partidos, resulta imposible o inútil sacar conclusiones categóricas. Las lesiones son inevitables, la enfermería nunca se termina de vaciar, hay rotaciones, bajones físicos y picos de forma… Los equipos lo saben y dosifican esfuerzos, miren Efes, favorito al título y mariposeando desde hace tres meses. De turismo en Valencia el miércoles y como un apisonadora en el Palau el viernes, porque ese partido sí les ponía. Siendo realistas, y manque nos pese a los aficionados, que queremos mandanga semanal, la meta es cumplir en la fase regular sin quemar mucha gasolina y llegar con la mayor cantidad de jugadores sanos y en forma a los partidos por el título.

Partiendo de esa premisa, el Madrid está cumpliendo con nota, líder en solitario de la Euroliga tras 19 jornadas, sin sensación de pisar el acelerador o de alcanzar su mejor versión, es más, pese a bastantes bajas por lesión, el encaje de los nuevos, las dudas sobre Mateo y el puesto de base. No dan ningún título por el liderato en enero, pero te acerca al objetivo (factor pista en top8) y permite construir desde cierta tranquilidad institucional, así que bienvenido.

Sé que pesan en el ánimo del aficionado blanco las derrotas contra rivales directos en la primera fase, nuevo mantra del sector cenizo. Pero es un mantra matizable, veamos: hay cinco equipos además del Madrid que podríamos asumir que estarán en el top8. Contra ellos el balance es de tres derrotas por la mínima, FCB -2, Mónaco -1 y Olympiakos -2, y dos victorias sólidas: Efes +9 y Fenerbahce +14. ¿Que la gestión de partido de Mateo en esas derrotas fue mejorable? Sí. Pero tampoco son resultados como para trazar un patrón, más allá de la igualdad entre la aristocracia de la competición, de la que seguramente tengamos nueva entrega las dos próximas semanas, que el Madrid visita El Pireo y recibe al Barca.

La rotación variable

Otro ejercicio al que nos está obligando la temporada es a entender que la rotación no está grabada en piedra, salvo en el puesto de pívot, Tavares titular y Poirier reserva. El resto puede cambiar, adaptarse en función de las lesiones, las características del rival y el estado de forma de los jugadores. La plantilla blanca es larguísima, quizá la que más de la competición, si tomamos como referencia la calidad y precio del fondo de armario, es decir, los puestos del 10 al 15. Una plantel con una sola estrella (Edy) pero mucha burguesía. Objetivamente es una fortaleza en una temporada tan larga, pero una que suele descolocar al aficionado, que prefiere la hoja de ruta por adelantado y publicada en el BOE.

A ver, ¿pero entonces quién es el titular? Pues NINGUNO, el que mejor esté.

Un ejemplo han sido los tres últimos partidos de Euroliga, sólidas victorias, con un balance de +60 puntos. Han coincidido con menor minutaje de Llull, sobre todo en la dirección, con Goss y principalmente Chacho como beneficiados. Si el rival carece de un base diferencial y/o muy físico entonces se notan menos las carencias defensivas del canario, puede jugar más minutos y en ataque es claramente el que mejor mueve al equipo. Su perfil es muy complementario al de Goss que, por cierto, está alcanzando un nivel interesante tras la lesión: es el base más capaz atrás y, ahora que está sano, tiene piernas para atacar el aro y procurarse tiros de alto porcentaje. 56% de campo en Euroliga, ni tan mal.

No será la solución más ortodoxa, ni la preferida por muchos, pero si Chacho puede dar 15 minutos de calidad y con Goss a este nivel físico, el tan comentado agujero en el puesto de base parece menos. Sobre todo a medida que coja forma Hanga, que seguramente juegue también minutos de uno. ¿Se atreverá Chus a mover entonces a Llull al puesto de escolta a tiempo completo, o segundo base (como prefiráis llamarlo), pero en un rol con menos bote?

El otro ejemplo de que nada está grabado en piedra en la rotación blanca es el aumento de los minutos de Cornelie, en paralelo a su evolución en facetas de juego distintas al catch&shoot desde la esquina. En verdad, resulta que lleva más canastas anotadas de 2 que de 3 en la Euroliga… Quiero dedicarle un artículo específico en las próximas semanas, pero desde ya os digo que me han hablado bien de su ética de trabajo y que su evolución me gusta mucho. Llegó al Madrid con caché bajito, fama de blando y sin experiencia Euroliga, jugador de rol, pero está creciendo rápido en rebote, defensa, definición cerca del aro, juego sin balón, etc. El contraste es importante con Yabusele, renovado de larga duración con rango de titular pero estancado en su evolución. Sigue siendo un activo de la plantilla, claro está, pero su IQ en pista es mejorable, juega este curso más acelerado y raro es el partido que no deja algún gesto macarra. Bien, pues la distribución de minutos entre ambos está ahora en torno al 50%, incluso en partidos exigentes, nada que ver con las minutadas de Yabusele al comienzo de curso.

Chacho – Poirier, un match de manual

Con la tercera victoria consecutiva en Euroliga, la más cómoda de todas, el Real Madrid 22/23 sube al cuarto puesto y parece estar entrando por fin en velocidad crucero, dejando atrás la sensación de urgencia que arrastraba en el comienzo de curso. La sensación de tener que reivindicarse a cada partido, sobre todo el entrenador, culpable del delito de no ser Laso.

Una sensación, dicho sea de paso, un poco artificial, propia de una masa social alérgica a la derrota, inevitable en una temporada a 80 partidos. Además, hay sectores, incluidos importantes medios de comunicación, que ya nos conocemos todos, deseando que le vaya mal a Chus Mateo para que por efecto contagio caiga quizá también JCS, artífice del muy discutible despido de Laso. No me encontraréis en esas guerras de guerrillas: si el balón está en juego, el Madrid por encima de todo.

Aparquemos la política y volvamos al parqué de Goya. La mejoría del grupo tiene bastante que ver con el repunte defensivo del backcourt gracias al regreso de Hanga y Abalde, si bien el húngaro cayó lesionado ayer tras ser titular. Quedamos pendientes de su pronóstico, aunque su posible ausencia la compensa en parte la vuelta de Williams-Goss, también de un perfil defensivo y que aparentemente regresa a nivel físico esperanzador, para haber estado medio año de baja. Nueve de valoración anoche en solo siete minutos.

También pesa en la mejoría del equipo la recuperación para la causa de un activo clave, Poirier, puntal de la segunda unidad y que había firmado un inicio de temporada indigno. Ya enseñó los dientes contra Efes la semana pasada pero anoche fue sencillamente el mejor, recordando al del curso pasado. Encendió su ventilador de estadística (28 de valoración) y formó con Chacho una alianza devastadora, con minutos de muchísimos quilates, bordando el pick and roll. El francés tiene una combinación de velocidad, altura, manejo de ambas manos, timing de salto, coordinación y agresividad cuando ataca el aro que le convierten en quizá el mejor center de la Euroliga en situaciones de bloqueo y continuación. Bien alimentado es un filón, y pocos interpretan el 2×2 como Sergio Rodríguez, que ayer se puso el traje de luces. Ambos maximizan las virtudes del otro, un match de manual si esto fuese Tinder.

Tampoco pretendo que nos chupemos las pollas, al menos no todavía, que el partido fue propicio, pero no por ello vamos a dejar de disfrutarlo. El canario, tan irregular y discreto en el arranque de temporada, se soltó anoche el pelo e hizo disfrutar a la tribuna. Dejó momentos brillantes que recordaron a sus mejores años en Goya, cuando salía del banquillo y dinamitaba los partidos en el segundo cuarto, «con la vaquilla a medio torear«, que decía Turpin. Cuando se pone así, casi cada ataque es canasta o asistencia, puro entretenimiento. Asumimos que Chus tomó nota de ese dueto con Vincent y los hará coincidir en pista el mayor tiempo posible.

Tan de guante blanco fue el partido que coach M pudo reducir el tiempo en pista de los más sobrecargados, Tavares, Musa y Deck, que se quedaron en 15, 15 y 17 minutos, respectivamente. También pudo hacer debutar a Eli Ndiaye en Euroliga, que de hecho se fue hasta 22 minutos de juego, muy dignos, cumpliendo con nota en labores defensivas.

Hablemos de bases: Chacho, Pierria y el hándicap de la lesión de Goss

La lesión de Nigel Williams Goss, que se pierde también los plyoffs ACB, representa para el Real Madrid un contratiempo no solo deportivo a corto plazo sino que el alcance de la misma, que conoceremos en las próximas horas cuando se someta a pruebas en la capital, tendrá trascendencia en la configuración de la plantilla del año que viene.

Llevamos meses hablando de la necesidad de reforzar el puesto de base, de la carencia de un director estelar. Ya sabemos que Chacho vendrá por Heurtel, contrato de 1+1 temporadas, lo que mejorará seguro el puesto porque el francés sencillamente no cuenta para Laso. Pero tampoco parece un salto de calidad significativo, dados los 36 años del canario. El salto de calidad debería venir por el otro base, y ahí es donde influye la lesión de Goss.

Si se cumplen los peores augurios y resulta que se ha roto el tendón de Aquiles, hablamos más o menos un año de baja. La posibilidad de cortarle este verano, que el club barajaba seriamente, se complica sobremanera. Despedir a un jugador bajo contrato garantizado y con una lesión tan grave, además de dudosamente ético, sería muy caro, porque al carecer de mercado destino no perdonaría ni un céntimo del salario para la 22/23. Y puestos a pagarle todo o casi todo el contrato, pues te le quedas. El jugador continuaría, convirtiéndose en un activo inmovilizado dentro de la masa salarial, un hándicap financiero para la maniobrabilidad de la sección en mercado. El pobre Goss no tiene ninguna culpa, no me malentendais, es maldita mala suerte.

Sin embargo, conservo esperanzas de que la lesión no resulte tan grave. El Madrid publicó un vídeo ayer de la llegada del equipo al pabellón antes de la final en el que aparece el jugador caminando por sí solo, sin muletas, con relativa normalidad. La imagen contigua es una captura de ese vídeo. Si se tratase de una lesión menos grave, digamos 1-2 meses de baja, dejaría al Madrid las manos más libres para decidir. Puede cortarle a un precio más o menos asequible porque el jugador tiene buen mercado (suena para Bayern y Maccabi) o puede quedársele y ver su evolución en su segundo año de blanco, tras un último mes interesante. Esta parece a día de hoy la opción más probable.

¿Bases que puedan suponer un salto de calidad? Pangos está comprometido con Milán, las negociaciones de Efes para renovar a Larkin parecen avanzadas y Campazzo sigue siendo un sueño lejano, además con un timing horrible, por el decalaje entre el mercado Euroliga y el de agentes libres en EEUU. Satoransky, cuyo regreso a Europa tampoco daría por sentado, suena para FCB y Efes en caso de salir Jokubaitis y Micic.

Henry, segundo intento

El Madrid no parece dispuesto a remangarse, a entrar en puja económica abierta con otros clubes Euroliga, así que mira opciones menos ambiciosas, planes B o hasta C. Marca publica hoy que la sección piensa de nuevo en Pierria Henry, que ya fuese el plan A el pasado verano, a petición de Laso, una operación que se cayó por el volantazo de Baskonia. Querejeta, que había tasado inicialmente sus derechos ACB en unos 500k euros, le dijo después al Madrid que podía olvidarse de Henry porque intentaría retenerle con el cash ingresado por la cláusula de Vildoza. El club blanco activó entonces el fichaje de Williams-Goss, otra pieza cotizada de mercado.

Según Marca, el Madrid ha preguntado a Baskonia en los últimos días por sus aspiraciones respecto al derecho de tanteo por Pierria este verano. Según Huguet, en Mundo Deportivo, ya hay incluso acuerdo entre las partes, claro que según él también lo había en febrero por Larkin. Henry, que tiene pasaporte cotonou por Senegal, quedará seguramente libre en las próximas semanas, pues el segundo año de su contrato con Fenerbahce es opcional y su rendimiento/precio este curso no invita a ejecutarlo.

Os confieso que su hipotético fichaje, especialmente si es por Goss y no junto a Goss, me da un poco de pereza. Si el verano pasado me parecía una opción razonablemente interesante, este me lo parece bastante menos. Primero porque el mercado de bases en verano 2021 era un erial y este año sí ofrece algunas alternativas de quilates si estás dispuesto a gastar. Y segundo y principal porque la hostia que se ha dado Pierria en su única experiencia Euroliga fuera del ecosistema Dusko ha sido sonada. Fenerbahce es la gran decepción de la temporada, 11º clasificado sin rusos pese a un presupuesto alto, y algo habrá contribuido Henry, base titularísimo, de 28 minutos por partido y un preocupante 38% en tiros de campo. Que su fichaje se convierta en plan A para base titular del finalista de la Euroliga a alturas de mayo me habla por un lado de una dudosa ambición del club y por otro lado de una mayor influencia de Laso en la política de fichajes.

El único otro nombre que suena es el de Lorenzo Brown, faro del backcourt de Unics Kazán, con promedios de 14 puntos, 6 asistencias y 17 de valoración en Euroliga. En los duelos directos contra el Barcelona este curso ha firmado 22 puntos y 8 asistencias en la ida y 27 puntos y 9 asistencias en la vuelta. Poca broma. La viabilidad de la operación pasa, agarraos, por la adquisición de un pasaporte español exprés. El puesto de base es un solar en la selección tras la lesión de Ricky así que la Federación busca talento importado, y Lorenzo Brown tiene buen trato con Scariolo de su etapa en Toronto. De entrada suena a triple desde el centro del campo pero, según AS, la FEB está acelerando para nacionalizarle este mismo verano y que pueda jugar en septiembre el Eurobasket. Dado el caso, podría fichar por el Madrid como agente libre, un ahorro sensible respecto a Pierria, por el mencionado peaje Baskonia. Aunque deberíamos asumir que a día de hoy el escenario más probable es Henry.

El Madrid vuelve a dar señales de vida y sube el 1-0

El Real Madrid se tomó anoche un break de la caraja de los tres últimos meses y se vistió de equipo de nuevo. La ocasión bien lo merecía, que el regreso a la F4 es el objetivo principal de la temporada, asumiendo que levantar títulos está complicado dada la distancia que media con el Barca en duelos directos. Se jugó como equipo y se apretaron los dientes, hubo compromiso en las ayudas defensivas y los balones divididos, la clase de detalles que sumados pueden ganar partidos y se han echado de menos durante la crisis (que no doy por cerrada). Igualita la actitud que contra Bilbao o Bayern, por poner dos ejemplos recientes. Por momentos recordó al equipo sólido y coral del primer tercio de curso.

Hay una parte lógica de tensión competitiva por la importancia de la cita, pero quiero pensar que hay también otra relacionada con un aire un poco menos viciado en el vestuario, después de lavarse los trapos sucios de las farras. Por cierto, que Thompkins y Heurtel siguen en proceso de indulto pero se quedaron fuera de la convocatoria (en la que sí estuvo Núñez), y tampoco es que se les echase de menos. La baja sensible era la de Gabi Deck, con covid, pero el equipo encontró otras soluciones, con este formato de juego exterior: NWG-Llull de bases, Causeur-Abalde de escoltas, Hanga-Rudy-Taylor de aleros. Son las ventajas de una plantilla tan larga, capaz de enjuagar tres bajas en un partido clave.

El bulo de la marea amarilla

Corrieron ríos de tinta en las 48 horas previas al partido sobre la presencia masiva de aficionados macabeos en Goya, haciendo saltar las alarmas en club y afición ante la posibilidad de un episodio tipo Eintracht en el Camp Nou. Bien, todo fue un rumor que se fue haciendo enorme por efecto bola de nieve. La marea amarilla que se esperaba de al menos 2.000 aficionados se quedó en un grupo de unos 200 o 300 situados en el gallinero de la tribuna de calle Goya. En general el dato de asistencia fue decepcionante: 7.600 espectadores, dos tercios de entrada en unos cuartos de final de Euroliga y contra un rival histórico. Mucho abonado prefirió quedarse en casa viendo el Osasuna-RM de fútbol, con mucho menos en juego.

Volviendo al partido en sí, uno mira la estadística y destacan sobremanera esos 16/29 triples, que de entrada parece que sonó la flauta. Hubo lógicamente una parte de acierto, pero otra fundamental relacionada con la estrategia defensiva de Maccabi, que se cerró sistemáticamente y colapsó la zona para cortar la vía de producción más evidente del Madrid, los pívots,. Entre Tavares y Poirier solo pudieron lanzar siete veces a canasta en 40 minutos. Como contrapartida, los israelíes concedieron bastantes tiros exteriores relativamente abiertos. Es de suponer que haya un ajuste para el segundo partido.

Contra pronóstico lo mejor con diferencia del Madrid fue el backcourt que partió de titular, Causeur y Goss. El francés venía bajito de forma, tiene 35 años y empieza a ir justo de gasolina: promedios de 2.8 de valoración en 19 minutos en los siete partidos desde su regreso. Pero es un animal competitivo y suele rendir mejor en partidos importantes, ayer fue el caso. Sin necesidad de tiempo de balón y dando pocos botes se fue a 20 puntos con 7/11 de campo. Salvando las distancias, un rol de ejecutor con cierto parecido al de Carroll y que el Madrid ha venido echando de menos. Goss jugó un encuentro sólido el domingo contra Breogán y anoche mantuvo nivel cuando de verdad se necesitaba: 11 puntos y 8 asistencias, su techo en Euroliga, para 18 de valoración, además de una muy meritoria labor defensiva, lidiando casi siempre con la más fea (Wilbekin). Dirigió con más aplomo y solvencia de lo que nos tiene acostumbrados, un nivel que si es capaz de mantener sirve para equilibrar un poco la plantilla, compensando la cojera que arrastramos en el puesto de base.

El rompecabezas del Madrid para el puesto de base

Lo publican dos medios distintos el mismo día (Marca y Encestando), no necesariamente en base a las mismas fuentes, así que doy credibilidad a la información, al margen de las vueltas que pueda dar aún la temporada. Y lo que publican es que el Real Madrid ya se está moviendo muy activamente en el mercado buscando bases para el curso que viene. Con la idea de incorporar no uno sino dos, así que ni Goss ni Heurtel seguirán, una forma poco sutil de reconocer que la apuesta del pasado verano ha salido rana, sea por el propio nivel de los dos jugadores y/o por la incapacidad de Laso de adaptarlos.

También se busca un escolta anotador y un ala-pívot reserva de corte defensivo, pero la prioridad deportiva absoluta es reforzar el puesto de base, la creación desde bote, y donde por tanto se puede romper el cerdito. Y a priori no debería ser pequeño ese cerdito, que el Madrid es de partida uno de los presupuestos más altos del continente. Además, este verano se libera de la carga de algunos contratos de veteranos a sobreprecio y recibirá nuevos pagos de la hipoteca de salida de Campazzo y Garuba. Precisamente reforzar la dirección es la prioridad porque desde la marcha de Facu viene siendo el principal (que no único) talón de Aquiles del equipo, en vista de que el sistema Laso depende de creadores diferenciales para carburar.

‘Coach Tiquismiquis’

Dicho lo cual, podemos proceder al salseo, es decir, a los nombres de futuribles, que en todo caso son habas contadas, y sobre los que en realidad llevamos dando vueltas en círculo desde hace meses. Tanto Marca como Encestando apuntan el nombre de Raulzinho Neto, que termina contrato en Wizards, cumple 30 años en mayo y tiene pasaporte comunitario (italiano). Cuando el río suena… Es rápido, tiene puntos en las manos (8.7 promedia en NBA este curso) y ha ganado mucho músculo desde que saliese de Murcia en 2015 rumbo a Utah, aunque a tenor de sus números no destaca precisamente por generar para el resto. Con sus 184cms de altura promedia más rebotes que asistencias, y tampoco es que comparta quinteto con Jokic… Sus expectativas económicas al parecer encajan con el presu del Madrid, matrimonio de conveniencia a primera vista. No le veo para titular en un candidato al título a la Euroliga, pero como base reserva puede estar bien tirada, siempre que tenga el beneplácito de ‘Coach Tiquismiquis’.

En realidad, de entre los bases que acaban contrato, los dos únicos que supondrían un verdadero salto de calidad inmediato para el Madrid son Campazzo y Larkin. El argentino, a pesar de su discretísima temporada, parece tener mercado en la NBA, entre los clubes que le pretendieron en 2020 y a los que dio calabazas para recalar en una franquicia con aspiraciones como Nuggets. Está convencido y tampoco le tengo por un loco: ya ha comunicado al Madrid que no cuenten con él salvo giro mayúsculo de acontecimientos.

Show me the money

De Larkin dijo Laso el año pasado que es «el jugador más explosivo de la Euroliga», suponemos que este sí le gusta. Huguet publicó en febrero en Mundo Deportivo sobre el interés blanco, pero algunos parroquianos corrieron a desestimar el rumor por la sindicación de la fuente. Resulta que no iba desencaminado puesto que, según Marca, el jugador ha rechazado ya una oferta del Madrid de dos millones de dólares anuales, entendemos que netos, que sería el exacto mismo rango salarial que Tavares y que Facu en su día (3.6M de euros brutos). Recordemos la importancia de los equilibrios salariales para la paz del vestuario…

Tampoco tomaría la negativa de Larkin como una puerta definitivamente cerrada, sobre todo si es «una primera oferta«, como especifica Nacho Duque en su texto. Al fin y al cabo, poneros en el pellejo del jugador ¿por qué iba a aceptar un preacuerdo tan pronto, en marzo, por un 40% menos de salario que el actual? Ya tendrá tiempo de bajarse de la burra más adelante si hace falta, y el Madrid de subir su oferta.

Si Larkin sigue siendo una opción, el contexto de mercado y el tiempo pueden jugar a favor del club blanco. Primero, porque los salarios top se han contraído por la pandemia, nadie en Europa en 2022 va a pagar a Larkin los 3.4M$ netos que cobra ahora. Imagino que su agente no es gilipollas y ya lo sabe. Segundo, por la falta de competencia: con los equipos rusos fuera de la ecuación, con el Barca hipotecado y la lira turca bajita se reduce el número de destinos potenciales. Pocos clubes, si es que alguno, pueden llegar a las cifras del Madrid por un base este verano. Solo se me ocurre el propio Efes, en caso de que Micic salga a la NBA, el Armani Milán, donde termina contrato Delaney, o Partizán, si el gobierno serbio sigue inyectando pasta a lo loco en los clubes deportivos.

Si Larkin se enroca en una cifra y ningún club europeo la alcanza, siempre podría intentar como alternativa reengancharse (de nuevo) a la NBA, que no deja de ser la liga de su país. No es que estén los general managers allende el mar desvelados por él, pero tampoco es descartable que pueda colocarse. En ese escenario cabe plantearse dos cuestiones: ¿cuánto puede esperar el Madrid para cerrar el fichaje pivotal del verano? El mercado NBA de agentes libre no empieza hasta el 2 de agosto. ¿Es sensato fiar la suerte del proyecto a un jugador cuya prioridad absoluta parece ser la pasta?

Planes C

Marca menciona otros cinco nombres, aunque algunos me parecen de relleno. Chacho y De Colo, por ejemplo, que terminarán este curso con 36 y 35 años, respectivamente. Por no hablar de otros deal breakers, como el derecho de tanteo de Valencia y la enemistad JCS-Chacho. Scottie Wilbekin da el nivel, pasaporte comunitario y 29 años, pero también parece una opción lejana, dado que le queda otro año de contrato en Tel Aviv: ¿por qué dejaría Maccabi ir a su estrella? Ha sido quizá el club más golpeado económicamente por la pandemia, pero ¿tanto como para tener que poner en venta vía transfer a su go-to-guy?

Tomas Satoransky sería otra alternativa improbable: el Barca se guardó sus derechos para Europa, y tampoco parece claro que cruce el charco este verano, viendo el repunte de sus minutos desde que regresó a Washington en febrero.

La opción más creíble de las cinco, que tampoco probable, parece Kevin Pangos (29 años, pasaporte comunitario), cuya situación contractual con CSKA pende de un hilo. Firmó un contrato por tres temporadas solo un día antes del inicio de la invasión de Ucrania. Oficialmente no se ha desvinculado del club, como Shengelia, Lundberg o Hackett, pero tampoco se ha incorporado. Recordemos que la competición en la liga rusa sigue con ‘normalidad’, y Clyburn y Milutinov están jugando. A falta de conocer el desenlace de la historia Pangos-CSKA, parece incierto que el canadiense juegue en Moscú la próxima campaña si los equipos rusos son excluidos de nuevo de la Euroliga, un supuesto probable, dado que el conflicto en Ucrania y la guerra de sanciones parece que van para largo.