Mi análisis de la plantilla 2024/25 del Madrid

Me estaba reservando mi opinión sobre la plantilla del Real Madrid 24/25 hasta tener el dibujo completo, asumiendo que se ficharía un sustituto tras la marcha de Yabusele. Pero pasan los días, este sábado empieza el nuevo curso y no parece que vaya a venir nadie por ahora, así que podemos ir sacando algunas conclusiones.

Vaya por delante que estamos en pretemporada y este artículo no pretende ser un pronóstico de resultados sino simplemente un análisis de plantilla tras los movimientos de verano, dadas las cartas previas y las condiciones de mercado.

El roster me gustaba bastante a 20 de agosto: movimientos sensatos dentro del presupuesto disponible, como desechar la operación Lorenzo, que entre transfer y salario se ponía en un precio disparatado, una vez entró Panathinaikos en la puja. Andrés Feliz no tendrá la magia de Chacho ni la solera de Brown, pero es mucho más joven, cumple en ambos aros y ha pasado con notable toda la mili previa a la Euroliga. Tienes base reserva para varios años y para los 85 partidos de temporada, no solo para 20 como con el último Chacho, lo que obligaba a cargar de minutos a Campazzo en fase regular, que llegaba saturado al tramo final de curso.

La apuesta del Madrid este verano parece por el físico, la versatilidad y la juventud, dando prioridad a la columna vertebral con las renovaciones de Tavares y Hezonja, la cesta en la que se han depositado la mayoría de huevos. Personalmente, pongo muy en valor la continuidad de Mario, que estuvo con pie y medio fuera. Un jugador muy difícil de sustituir por su versatilidad y condición de cupo nacional. Por cierto, mi info es que el salario de su nuevo contrato está en el barrio de los 2M netos anuales más que en el de los 2.5M, como se aseguró en su día un poco a la ligera. Aquella cifra, vista en perspectiva, no tenía demasiado sentido. Recordemos que Hezonja se quedó con el culo al aire (posición negociadora débil) tras retirar el Barca su oferta. ¿En qué cabeza cabe que, en esas condiciones, se le firmase más dinero que a Tavares (±2.4M)?

Plano deportivo vs plano financiero

La espantada de Yabu a final de verano, que lógicamente no entraba en los planes, cambió un poco la configuración de plantilla y ahora tengo algunas reservas, en concreto respecto al banquillo. En el plano financiero, sacar 2.5M de euros de cláusula (a plazos) por un jugador secundario en último año de contrato es un pelotazo, pero si hablamos en el plano deportivo la plantilla se resiente, máxime si no cubres la salida. No es que el francés fuese referente del proyecto pero sí el principal recurso anotador desde el banquillo y un jugador apreciado en el vestuario. Y, claro, todo esto sucede un verano en que dos de los principales rivales directos se han reforzado con mucha ambición, ya sabéis, los griegos.

¿Acabará fichando el Madrid? Supongo que dependerá de los resultados (y sensaciones) en el primer tercio de curso, de posibles lesiones y eventuales oportunidades de mercado, que no pasan cada 10 minutos, como el autobús, y raramente cuando las necesitas. Recordemos que se fue Campazzo hace cuatro años, siendo bastante más importante que Yabu, y el club no fichó sustituto. Entonces estábamos en pandemia, ahora con los conciertos cancelados en el nuevo Bernabéu

Dejando el factor pasta de lado por un momento, Ibaka me parece el fichaje más importante de la cosecha, por lo menos a corto plazo. No ha despertado demasiada ilusión o ruido en la parroquia, supongo que por su edad (35 esta semana), por ser cara conocida y porque sustituye a Poirier tras un gran curso. Pero aporta valiosas variables ofensivas, así como experiencia en la élite, un aspecto a tener en cuenta tras la salida de los tres más veteranos de la plantilla. Si había dudas sobre su nivel y estado físico en el ocaso de carrera, esas quedaron despejadas en Múnich la pasada campaña. Y su pretemporada de blanco ha venido a confirmarlo: sigue siendo burguesía Euroliga, un recambio muy digno a la marcha inevitable de Vince.

Usman, cambio de planes

La incorporación de Garuba no se planteaba originalmente como recambio a la salida de ningún jugador sino como oportunidad de mercado que aprovechar, un comodín para la pintura. Sin embargo, la fuga de Yabusele seguramente obligue a cambiar la hoja de ruta y alinearle más como alapívot, cuando el puesto al que tendía es el de center, tras su evolución física en los años NBA, que ha ganado bastante masa muscular. Es un perfil táctico opuesto al de Yabu, así que a priori encaja mejor con Ibaka en pista que con Tavares.

Estratégicamente veo el de Garuba como un fichaje incuestionable. Se fue a EEUU pagando su cláusula de 3M (supongo que aún no la habrá terminado de abonar) y vuelve como agente libre. Un chollo en sí mismo, pero aún más dado el precio al que cotiza en mercado el kilo de cupo nacional joven. Contexto: el verano pasado el Barca apoquinó 2.2M por los transfers de Parra y Brizuela, y Baskonia pagó otros 800k por el de Khalifa Diop.

He leído comentarios despectivos de ‘madridistas’ sobre Garuba por su discreta participación en los JJOO, tertulianos sentenciando a un chaval de 22 años en base a una muestra de solo tres partidos. Cito textual: “Da pena, pésimo, pasado de kilos, nulidad extrema, no sabe jugar al baloncesto, nivel LEB”… Recordemos que Usman se fue a la NBA como Mejor Joven de la Euroliga  (2021) y que tuvo un rol defensivo clave en el oro de España en el Eurobasket 2022. Ni siquiera hay que irse tan lejos, este mismo verano rayó a nivel notable en el torneo preolímpico. Pensando en el Madrid a medio plazo, le veo potencial para ser diferencial en defensa, y con margen de mejora en ataque. Eso sí, le falta mucho ritmo de competición (=confianza) después de tres años de minutos de la basura y ostracismo en América. Entre eso y su lesión en pretemporada, asumo que su adaptación será más lenta que la de por ejemplo Ibaka.

Por último está Rathan Mayes, un fichaje barato y de autor de la dirección técnica para equilibrar finanzas, poco que perder por ahí. A priori un perfil que puede gustar a la grada, escolta anotador y activo en redes sociales, aunque me genera dudas que a su edad (30) llegue sin la menor experiencia en élite FIBA. Pasar del Krasnoyarsk al Madrid es un como saltar del Miraflores a los Celtics. Tampoco es que vaya a ser piedra angular de nada, entiendo que su rol pasará por desahogar de minutos a Llull-Musa en ACB y como desatascador puntual en Euroliga.

Al margen de fichajes, espero (o más bien deseo) el step up de algún jugador de fondo de armario. Pienso en los chavales (Hugo y Ndiaye), y sobre todo en Abalde, con el voto de confianza de su renovación y al que se ha visto fino en pretemporada. La retirada de Rudy reduce la competencia en el puesto.

Vista en perspectiva, tal y como está a día de hoy, la plantilla tiene un pepino de quinteto titular (Facu, Musa, Deck, Mario y Edy), que si llega sano a mayo-junio puede mirar a los ojos a cualquiera. Pero también se ha desinvertido mucha masa salarial en el banquillo respecto al curso pasado, y queda una segunda unidad algo más corta, con muchas piezas que acoplar y bastantes incógnitas. Trabajo por delante para Chus Mateo. A diferencia del año pasado, que solo llegó Facu en verano y el equipo jugaba de memoria desde el principio, este curso no espero velocidad crucero hasta navidad.

Yabusele, la espantada olímpica

Esta no la vimos venir, creo que ni el propio Yabusele hace unas semanas. Atendiendo a la información de múltiples periodistas americanos de máximo prestigio, el alapívot galo deja el Madrid después de tres temporadas y pone rumbo de regreso a la NBA, a los Sixers de Philadelphia, aprovechando el viento de cola de su magnífica actuación en los JJOO. Pensé que los 2.5 millones de cláusula serían un muro infranqueable, no deja de ser una de las mayores cláusulas de salida de la historia de la Euroliga. Pero de nuevo se demuestra que no puedes poner diques al mar, solo asumir que eres segunda división y cobrar el peaje más alto posible.

Yabusele, como Facu en su día, debía estar como loco por la música, porque se marcha en una situación a corto plazo de absoluta precariedad financiera. Firma un año por el salario mínimo, a razón de 2.2M$ brutos, aproximadamente lo mismo que ganaba en Madrid, con la diferencia de una enorme deuda por delante. Los Sixers pueden poner hasta 850k en concepto de transfer pero el resto (1.65M) saldrá del bolsillo del francés. ¿Cómo? Asumo que mediante un acuerdo para abonarlo a plazos, a cambio de que el Madrid retenga sus derechos en Europa, una fórmula que ya ha utilizado la sección en otras ocasiones.

Yabusele tendrá la esperanza de ganarse un contrato mejor a poco que cuaje en los Sixers y, en todo caso, este regreso le asegura una tercera temporada NBA y con ella cumplir las condiciones mínimas para optar a la pensión de la liga.

Desde el punto de vista del Real Madrid analizaría esta salida desde dos planos diferentes, el deportivo y el financiero. En el primero el plantel sale necesariamente perdiendo. Yabusele viene de firmar no solo unos grandes JJOO sino una sólida campaña en el RM, con promedios Euroliga de 10.5 puntos, 46% triples y 14,2 de valoración. Le considero uno de los 5-10 mejores alapivots PUROS del continente y, sin ser una pieza clave en la rotación blanca, sí que era uno de los puntales ofensivos de la segunda unidad. Recalco lo de alapívot puro porque cada vez se estila más la fórmula de aleros reconvertidos en alapívots bajitos. Tadas, Kalinic, Deck, Ojeleye, Hezonja, Parra, Hayes-Davies

Estando a finales de verano, cualquier reemplazo inmediato será necesariamente peor, incluido Davis Bertans, en el que habría posado sus ojos el Madrid como reemplazo, según el periodista italiano Mateo Andreani. 31 años, 208cms y tirador puro. Los Hornets le cortaron hace como un mes y desde entonces trata de colocarse en alguna franquicia, por ahora sin suerte. Recordemos que Baskonia no guarda el derecho de tanteo ACB porque salió de Vitoria vía acuerdo de desvinculación (=money), y en esos casos no se permite la inscripción en el tanteo. De quien sí guarda los derechos Querejeta es de Flip Petrusev, que bien podría buscar una salida de El Pireo ante el desembarco de Vezenkov y que os confieso, puestos a pajiplantillearnos, que sería mi opción preferida…

Tampoco descarto que el Madrid tire por ahora con la plantilla actual, esperando alguna oportunidad de mercado NBA a lo largo de la temporada, como lo fueron Tavares o Poirier en su día. De hecho, esa estrategia casaría más con el modus operandi habitual del club que un fichaje inmediato tipo acción-reacción. En todo caso, hasta que llegue un sustituto, si llega, la salida de Yabusele significa más oportunidades para Ndiaye y más minutos como alapívot para Deck, Garuba y Hezonja.

Negocio redondo

Desde un punto de vista financiero, esta operación es un negocio redondo para la sección, sin paliativos. Yabusele, que estaba a 10 meses de terminar contrato y sin mucha pinta de renovar, se va dejando 2.5M en caja y liberando más de 2M brutos de masa salarial. Jackpot. Al margen del posible fichaje de un recambio, este dinero es oxígeno para acometer por ejemplo la renovación a largo plazo de Musa, llamado a ser el gran movimiento del club en los próximos meses.

En términos futboleros, Yabusele era para el Madrid un activo con la etiqueta de transferible, y lo era desde la pillada de farra en Atenas y el incidente en el playoff contra Partizán. También porque su rendimiento, siendo bueno, no llegó a ser todo lo que cabía esperar después de sus fulgurantes primeros meses en el club, cuando se fraguó su extensión de contrato. Ha madurado emocionalmente, mejorado su selección de tiro y el juego sin balón, pero las lagunas defensivas tienen peor arreglo, por eso veía muchos finales de partido desde el banquillo en favor de Hezonja, más implicado en rebote y defensa.

Esta salida sirve de ejemplo de la importancia de las cláusulas ascendentes. A comienzo de verano asequible, cuando aún deja margen para buscar un sustituto en mercado, pero muy alta a final de verano como contrapartida por reventar la planificación deportiva. En el caso de Yabusele, esa cláusula era de 1M hasta el 10 de julio y de los mencionados 2,5M desde entonces.

En resumen, mi opinión es que, siendo el Madrid un equipo que cocina sus proyectos a fuego lento, la salida del francés es un contratiempo pero no un drama. La plantilla cuenta con recursos para enjuagar a corto plazo esta pérdida y la sección recibe un chute financiero para acometer a medio plazo un reemplazo de garantías.

El verano blanco en perspectiva económica

Con la salida de Causeur se resolvió la última incógnita y queda cerrada la plantilla del Madrid 2024/25, a falta del anuncio oficial del fichaje de Garuba, que ya firmó su contrato. Habrá tiempo de analizar el perfil de las incorporaciones y su encaje táctico en los sistemas de Chus Mateo, pero hoy vengo a hablar de pasta, un elemento clave en la confección de todo roster. Al final, juzgar los fichajes y salidas sin el contexto económico es un poco mirar los árboles y no ver el bosque.

El factor que más ha condicionado los movimientos del Madrid este verano lógicamente ha sido la subida salarial que han requerido las renovaciones estratégicas de Tavares y Hezonja. La nueva nómina de Edy está como en 2.4M anuales netos y la de Mario, según mis fuentes, ronda los 2M netos, un dineral si tomamos la referencia de las bandas que manejaba hasta ahora la sección, con el 1.8M neto de Campazzo como techo salarial.

En cambio, no son cifras descabelladas si las comparamos con otras operaciones firmadas esta summeriada a estrellas de la Euroliga: Vezenkov 3.7M, Shane Larkin 3.5M, Mike James 3M, Kevin Punter 2.5M, Baldwin 2.5M, etc. El motivo, además de que el Madrid es un pagador fiable y un contender estable, es la estrategia del club desde hace varios años de ofrecer contratos muy largos a los pilares de la plantilla a cambio de ajustar un poco la nómina y así amortiguar su impacto en la masa salarial.

La renovación de Tavares y Hezonja es el principal aumento de gasto para el próximo curso (como 1.5M€ netos, o 3M€ si hablamos de coste empresa), aunque no el único incremento: la ampliación de Chus Mateo y el +1 de Musa conllevan cierta mejora salarial (y abróchense para el próximo verano con el bosnio), además, la finalización del descuento fiscal para Facu supone gastar un poco más para pagarle lo mismo. Como el presupuesto de la sección no aumenta, estos repuntes de gasto han tenido que compensarse por otras vías, de las que destacaría tres.

1.- Los ingresos por ventas, una partida a menudo olvidada pero bastante productiva en lo que va de 2024. Vukcevic dejó medio millón en las arcas en primavera en virtud del acuerdo alcanzado en su día entre Madrid y Partizán, por el que el club blanco se reservaba la mitad de su eventual cláusula de salida a la NBA, ejecutada en marzo rumbo a Washingtoon. Una cantidad similar (550k) deja la salida del canterano ruso Egor Denim, que vuela a la NCAA (Brimgham Young), siguiendo el camino de la mayoría de compañeros de generación. Además, el Barca abonó al Madrid unos 400k a cambio de no acudir al tanteo ACB por Juan Núñez. En algunos casos se trata de cláusulas que se abonan a plazos, a lo largo de varios años, pero igualmente es dinero. Casi millón y medio de euros a la buchaca.

2.- Los fichajes. La sección se ha movido con moderación en el capítulo de incorporaciones, no se puede hablar de austeridad pero sí de contención. Por ejemplo, se desistió del plan A para el base reserva, Lorenzo Brown, por su elevado precio al entrar otros actores en la puja y a pesar del preacuerdo verbal entre las partes. El fichaje de Andrés Feliz implicó transfer (500k) pero su salario a corto plazo es contenido, justo por debajo de los siete dígitos netos al año, una cantidad asumible dada la inflación en el mercado Euroliga de bases.

Por otro lado, se decidió no pujar por la continuidad de Poirier, con un chaché inviable para un reserva, mientras que la ficha de Rudy se suple con un canterano, Hugo González, que cumplirá el último año del contrato que tenía firmado y lógicamente sale mucho más barato que el balear. Por último, Rathan-Mayes llega por poco más que cuatro bocadillos de calamares de El Brillante, el caché propio de un extracomunitario de 30 años sin la menor experiencia en la élite. Un salario bastante por debajo del que libera de Causeur, al que sustituye, máxime con el descuento fiscal del primer curso. Fichaje de autor para cuadrar la masa salarial. Muy poco que perder, al menos económicamente.

3.- Planes de pensión. La sección ha dado carpetazo a su tradicional política salarial manirrota con los jugadores veteranos, a los que durante años ha pagado algo por encima de mercado como en agradecimiento a los servicios prestados. Rudy y Chacho cuelgan las botas motu proprio, mientras que a Llull y a Causeur, que terminaban contrato, se les ofreció renovar con un notable tajo salarial. En el caso del francés, según me comentan, un 65% menos de lo que venía cobrando, es decir, unos 265k euros netos, más o menos el salario que libera Alocén. Por motivos familiares Fabien daba prioridad a seguir en Madrid, pero una cosa es dar prioridad y otra hacer el primo. El Milán casi le duplicaba la ficha y aceptó, 500k netos. Suerte para Fab, le espera una gran ovación cuando vuelva a Goya.

En todo caso, veo plenamente lógica la decisión del club con él, terminaba contrato y no es operativo mantener a dos escoltas de 37 años. Y puestos a elegir no hay color, ya no porque Llull ostente rango de leyenda del club, sino porque rindió mejor la pasada temporada, es cupo nacional y puede echar una mano eventualmente en el puesto de base. Que la melancolía no nuble las decisiones directivas. Si lo pensáis, el RM ha acertado en los últimos años con el momento de salida de los veteranos extranjeros. ¿Qué han hecho Taylor o Thompkins después del Madrid?

Summeriada blanca 2024: una apuesta por el músculo

Detecto el ya casi habitual escepticismo y desdén veraniego en la parroquia hacia las operaciones de mercado del Madrid de baloncesto. Y es que la política de la sección huye de casi todo aquello que entretiene al aficionado medio en el periodo estival: los golpes de timón, el morbo, el cambio de cromos y la puja abierta (=sobreprecio) por los nombres de moda. En definitiva, el populismo directivo. Al contrario, la gestión blanca prioriza la estabilidad, los contratos largos, el crecimiento de los jugadores que ya están y la incorporación de agentes libres en operaciones negociadas desde primavera. Es más aburrido pero funciona.

Los principales movimientos del Madrid este verano han sido renovaciones: atar a Tavares y a Hezonja era estratégico, no tienen recambio posible en Europa. Sin embargo, no dejan de ser renovaciones y esas por definición ilusionan menos al parroquiano que los fichajes porque no implican novedad. Y a los que ya están se les da por sentado, aunque acaben contrato.

Verano de reservas

Una vez amarrado a largo plazo el núcleo de la plantilla salvo Musa (in process), los fichajes de este verano son de reservas, cuando no fondo de armario, jugadores por tanto de un perfil y un caché necesariamente más bajo que el de los titulares. En cifras, que no superen el millón neto de salario anual, particularmente tras el mordisco a la masa salarial que han supuesto las renovaciones.

Si hablamos de fichajes, a la parroquia de Goya le pesa un prejuicio estético similar a la del Bernabéu. Unos querrían comprarse una docena de mediapuntas y delanteros cada summeriada, y los otros a 20 escoltas tiradores blanquitos del Aliexpress, hasta encontrar al heredero de Jaycee Carroll. El club, a dios gracias, opera en función de parámetros más racionales, en concreto dos principales: las oportunidades de mercado y las necesidades de plantilla, teniendo en cuenta que se juega en dos aros.

Se habló con Kyle Guy en primavera, tirador clásico a coste moderado, pero la gerencia se decantó por Rathan-Mayes, también a coste bajo y de un perfil táctico diferente, menos conocido por el aficionado español, no por ello peor. Combo anotador, tampoco es manco lanzando de fuera pero suma sobre todo hacia el aro desde bote. Tiene más potencial defensivo, solo hay que ver su planta, sin olvidar el factor versatilidad, poder habitar los puestos de uno y de dos. Eso permite enjuagar la ficha de tercer base de Alocén (ahorro) sin quedarte con el culo al aire en caso de lesión de Facu o Feliz. Lógicamente, Llull también puede echar una mano ahí.

Feliz, Plan B

Feliz no deja de ser el plan B, porque la idea original para ese puesto era Lorenzo Brown, con quien llegó a alcanzarse un acuerdo verbal. Pero la operación se torció cuando Maccabi se subió a la parra con el transfer y Fenerbahce+PAO se entrometieron con ofertas salariales muy por encima de la del Madrid. El fichaje se ponía en un pico, más de lo que la lógica invita a gastar en un base de 34 años que llegaría con rol de reserva. Si Lorenzo era un fichaje de presente y pasado, el de Feliz es de presente y futuro, ocho años más joven y con margen de mejora aún.

El puesto de base es el más exigente en los sistemas del Madrid, así que le puede llevar un tiempo adaptarse. Tendremos que darle un margen antes de sacar conclusiones, recordemos por ejemplo que Williams Goss necesitó casi año y medio de barbecho para mostrar su verdadero nivel. En todo caso, Andrés Feliz el potencial lo tiene, se ha pasado con nota todas las pantallas previas hasta llegar a la Euroliga, siendo uno de los mejores bases de la ACB y de la Eurocup las dos últimas temporadas. No tiene la experiencia y la chispa de Chacho, pero a cambio ganamos un base que no cojea atrás y debe rendir todo el año, no solo dos meses, con lo que implica eso de liberación para Facu.

Ibaka es un recambio más que digno por Poirier, como reserva de Tavares, asumiendo de partida que era imposible fichar a un sustituto del mismo nivel que el francés porque necesariamente se saldría de presupuesto. La anomalía ha sido tener a Vince durante tres años saliendo desde el banquillo sin torcer el morro.

Leyendo a algunos por Twitter pareciera que fichásemos a Jesús Chagoyen. Un respeto, por favor, que Ibaka ha ganado un anillo de la NBA, 141 millones en salario, estuvo tres años en el mejor quinteto defensivo de la NBA y dos fue el máximo taponador… Está en el ocaso de su carrera, claro, pero demostró en Múnich el pasado curso que mantiene nivel burguesía Euroliga, al menos en la medida en que le respete el físico. Además es cupo nacional, conoce la casa y, muy importante, ha aceptado firmar por un solo año. Así que el riesgo es mínimo si sale rana. La guinda del pastel sería Garuba, una operación supeditada a que no encuentre equipo en la NBA, un escenario más o menos probable aunque con un horizonte temporal incierto. Sería un ariete defensivo para el juego interior, del tipo que no entra por los ojos al aficionado medio pero encarece sensiblemente el precio del punto rival, y eso también gana partidos.

Aunque no venga Usman, pero particularmente si viene, se queda una plantilla con menos experiencia pero bastante más físico que la del año pasado, y algo más versátil. Y en todo caso, atado el núcleo principal, no veo impedimentos para que el Madrid no continúe en la élite, contender a la Euroliga con permiso griego, que es donde parece estar ahora la pasta.

Balance 2023/24: las notas jugador a jugador

Me debatía entre poner notable alto o sobresaliente a la temporada del Madrid, y finalmente me animo con el sobresaliente. La cosecha es generosa, ese triplete nacional, pero además valoro mucho el camino andado. Ese primer puesto holgado de la fase regular Euroliga, no haber perdido ni un partido en playoffs ACB y el magnífico juego desplegado en amplios tramos de la temporada. El balance final ha sido de 72 victorias por 14 derrotas, el mejor de la historia de la sección si no me fallan las cuentas.

El apagón en la segunda parte de la final Euroliga hurtó el título continental, que hubiese significado la matrícula de honor, pero me niego a que 20 minutos (aunque los más importantes del curso) condicionen tanto el balance global como para bajar la calificación a notable. Así que, lo dicho, sobresaliente.

La temporada significa la consolidación del proyecto Chus Mateo, al que me parece increíble que no se haya renovado aún. Supongo que la ampliación se cerrará y anunciará en los próximos días, pero el mero hecho de que se haya pospuesto hasta última hora ya habla de cierta desconfianza que me parece injusta con lo demostrado por el técnico. Cuestiones tácticas al margen, hacen falta nervios de acero para llevar un vestuario así y mantenerlo bajo control: el equilibrio de minutos Poirier-Tavares, la gestión de vacas sagradas con nivel menguante o el numerito de prima dona ofendida de Mario tras la final de Copa.

El final de temporada deja cierto aroma a Último Baile, por los veteranos que se despiden y por la salida de Poirier tras su mejor campaña de blanco. La gerencia parece estarse moviendo con sensatez en mercado para suplirlos, pero replicar un plantel tan redondo va a ser difícil a corto plazo, porque hay jugadores irrepetibles y un cierto grado de azar que está fuera del control directivo.

Aquí van mis notas de la temporada.

Campazzo 9. Ha sido el mejor, Quinteto ideal de la Euroliga, MVP de Copa, Supercopa y fase regular ACB, la pared maestra de la evolución del equipo respecto a la temporada pasada. Al final, el de base es el puesto clave del basket FIBA y resulta diferencial contar con uno de los mejores sino el mejor de Europa, sobrado de talento, experiencia y carácter. El año pasado, Goss te aseguraba la defensa y Chacho movía al equipo en ataque, pero estabas obligado a elegir. Con Facu no tienes que elegir, es un notable alto en ambos aros. Atravesó un valle de forma a mitad de temporada, normal con su despliegue físico, las minutadas y la carga de partidos, pero luego rayó a gran nivel en los playoffs de Euroliga y la semifinal ACB contra el Barca. Con él y Edy atados a largo plazo el futuro se contempla con optimismo.

Chacho 6,5. Fue importante en el pico de juego del equipo en el primer tercio de curso, pero después se fue diluyendo, excepción del fogonazo en F4, porque a sus 38 años sencillamente no dan las piernas para mantener el ritmo nueve meses. Sus promedios acumulados entre las dos competiciones son de 4 puntos, 4 asistencias y 36% en tiros de campo, con 15 partidos en valoración negativa, de largo el que más del equipo. A falta todavía de confirmación, parece que ha sido su última temporada en el Madrid, sino también en el baloncesto profesional. Desde aquí darle las gracias por todo lo que nos ha hecho disfrutar estos años, uno de los grandes talentos de la historia del baloncesto español.

Alocén 5. Este curso volvió a jugar al baloncesto, que no es poco, después de casi dos años de baja por una rotura de ligamento y variopintas complicaciones. Solo por eso podría considerarse un buen año. Pero el Madrid no para por nadie, es mal lugar donde recuperar confianza y reencontrarse con el baloncesto, siempre con urgencias competitivas y la máxima exigencia. Gozó de pocos minutos desde su regreso y tampoco es que se reivindicase cuando los tuvo. Llegados a este punto lo mejor era separar caminos y así ha sucedido, pese a que le restaba otro año de contrato garantizado. Se ha desvinculado y ayer mismo fue anunciado por el Gran Canaria. Suerte y salud para él, en Madrid no pudo ser.


Musa 8,5. Roma no se construyó en un día. Algunos dudaron de él por su apagón de la recta final del curso pasado pero, señores, es que solo tenía 24 años. La novatada. Esta temporada se ha movido en sus números en fase regular, y su producción no ha decaído cuando la carretera se ha empinado, casi al contrario. MVP de la final ACB y el mejor del equipo en la Final Four: 35 puntos y 42 de valoración entre ambos partidos. Además, le endosó 24 puntos al Barca en la Supercopa y ha promediado 16 en los playoffs ACB, sin bajar del doble dígito en ningún encuentro. Un reloj. No es tan académico como Mario y le ayudaría abstraerse un poco del arbitraje, pero un caníbal de este calibre es un recurso valiosísimo, capaz de anotar por generación espontánea cuando al equipo se le apagan las luces. Debe ser uno de los pilares para los próximos años y como tal el club haría bien en trabajar desde ya en su ampliación de contrato, para evitar culebrones tipo Tavares y Hezonja.

Causeur 6,5. Termina contrato, tiene 37 años y bien puede (y seguramente debe) haber sido su última temporada de blanco. Y ha sido una digna, habiendo tenido que fajarse con Llull por minutos como reserva de Musa. Su rendimiento ofensivo es menguante, ya no le dan las piernas para atacar el aro en estático, pero ha tenido un papel defensivo interesante en algunos partidos, en función del rival, asumiendo el rol de especialista exterior vacante a la marcha de Hanga. Despedida con honores, uno de esos extranjeros secundarios, como Thompkins o Taylor, que han sido pegamento de vestuario y han ayudado a construir lo que hoy es la sección. Merci.

Llull 7,5. Ha disfrutado en la pista este curso como seguramente no lo hacía desde La Lesión. Se le ve cómodo en su rol de combo, de escolta anotador revulsivo, liberado de obligaciones de dirección. Le ha respetado el físico y, pese a la edad, conserva cierta chispa física y mental. Por su tipo de juego, tiene días que no entran y casi resta, y otros que parece Stephen Curry, pero en general la ecuación ha resultado positiva para el equipo esta temporada. Sus rachas han servido para cambiar tendencias o romper partidos, algunos importantes. Salvo sorpresa, será el único veterano que continúe, así que asumirá la capitanía y se esperarán de él pinceladas en pista y, sobre todo, liderazgo fuera de ella. Vamos, que le enseñe Rudy a encender la barbacoa…

Abalde 6,5. Ha aumentado prestaciones respecto al curso pasado, que no era difícil, convirtiéndose en un activo útil de rotación en ACB. Una mejora bastante ligada a la confianza en el tiro: su porcentaje de tres ha subido hasta un aseado 42% (58 de 140), cuando el año pasado se quedó en el 26%, un hándicap pues lanza a menudo liberado. No me hubiese sobrado algún minuto más suyo, pero no era fácil teniendo por delante a las viejas glorias. ¿Esperábamos más del gallego cuando se le fichó? Ciertamente, también creo que su cláusula influye en la percepción. Pero después del curso pasado yo ya compro casi cualquier cosa que pueda aportar, y este año lo ha hecho. Le queda otro de contrato garantizado y seguirá, no sobra como cupo nacional para la segunda unidad.

Deck 6,5. Temporada un poco discreta mientras estuvo, condicionado por el overbooking en el puesto de alero. Y después, las lesiones. Se ha perdido más de 30 partidos, incluyendo playoffs Euroliga y ACB por segundo año consecutivo. Se le echó particularmente de menos en la F4, su dureza, defensa e inteligencia en pista. Dedos cruzados para que se recupere bien y poder contar con él desde otoño. No es la estrella del equipo pero sí un jugador fundamental.

Hezonja 8. Me cuesta ponerle nota, porque ha tenido picos de sierra muy pronunciados. Por un lado estuvo brillantísimo en tramos de fase regular, líder del equipo durante el bajón de forma de Tavares y Campazzo. Pero también se borró mentalmente durante varias semanas después de la Copa, mohíno por su minutaje. Por último, ha sabido aportar defensa y rebote en la recta final de curso cuando el aro se le hizo un poco más pequeño. Su versatilidad, su rendimiento en ambos aros y su condición de cupo le convierten en un activo muy valiosos de la rotación. Todo lo relacionado con su renovación ha sido un descalzaperros, pero ya está, se queda y es objetivamente una gran noticia en términos deportivos.

Rudy 6. Tenemos el corazón blandito por su retirada, pero esto son las notas y, siendo honestos, su nivel esta última temporada ha sido discreto en términos generales, muy dosificado por Chus Mateo. Son 39 años y, aunque la cabeza le va como un avión, las piernas apenas le respondían ya para el mínimo que requiere la élite. Se ha perdido 32 partidos por descanso o lesión. Para el recuerdo queda el momento mágico de su partidazo en el 2º de la final ACB y esa ovación interminable que le brindó el Wizink, merecido agradecimiento por su aportación decisiva para cambiar el rumbo y la historia de la sección. Gracias eternas.

Ndiaye 6,5. Esperaba algo más de minutaje de Eli tras su irrupción al final del curso pasado, pero prácticamente desapareció de la rotación una vez Yabusele volvió en enero. Atrás cumple casi siempre, y con nota, y parece ir mejorando el tiro exterior, clave para su usabilidad como ala-pívot en la élite. No es un talento natural para el lanzamiento de tres, pero también es una suerte del juego que se mejora con tiempo y entrenamiento. Debe ir a más y asentarse como actor secundario.

Yabusele 7,5. Sensación de que vio las orejas al lobo con el incidente contra Partizán, hizo propósito de enmienda y lo ha cumplido. Este año ha bajado revoluciones en pista, menos trifulquero. Se ha concentrado en basket y eso ha repercutido directamente en su rendimiento, firmando una campaña sólida. Con las conocidas carencias atrás, pero con una notable aportación ofensiva desde su regreso en enero. Poca broma sus promedios Euroliga: 10.5 puntos, 46% en triples y 14.5 de valoración. Tiene otro año de contrato garantizado y está llamado ser una de las piezas importantes de la segunda unidad.


Tavares 7. No ha sido su mejor temporada de blanco: le llevó meses recuperar el ritmo tras aquella lesión de tobillo, y tampoco creo ayudase la incertidumbre por su renovación. Ahora bien, en mayo recuperó el tono y destrozó al Baskonia en playoffs de Euroliga y al Barca en semis ACB, pena de esos problemas de faltas en la final de Berlín. Ha acabado renovando por mucho dinero (lógico) y muchos años (riesgo), una apuesta importante del club a medio-largo plazo. Sobrevuela el miedo por la tendencia a lesiones y carreras cortas de los jugadores tan altos, pero también es cierto que nunca habíamos visto a un 2.20cms tan proporcionado y cachas. En todo caso, especificaciones al margen, es una renovación troncal que mantiene al Madrid como candidato a todo los próximos años.

Poirier 8,5. Con diferencia su mejor campaña en el club, una vez le han respetado las lesiones y ha encontrado un socio para maximizar sus virtudes. Esa sociedad con Chacho marcó la primera mitad de la temporada en la Euroliga, reventó partidos y nos dejó momentos de excelencia. El circo. La producción por minuto de Vincent este curso ha sido un disparate, y lo ha sido en ambos aros, que en defensa dio un enorme paso al frente, líder de la Euroliga en tapones jugando solo 18 minutos (¡!). Termina contrato y se marcha a Turquía, a cobrar lo que vale y ser titular. Ley de vida.

Después de todo, Mario se queda

El caso Hezonja queda zanjado, después de todo seguirá de blanco. Se queda en Goya, no sin un regusto agridulce por los giros de guión inverosímiles de las últimas 72 horas, en que salió a la luz un preacuerdo con el Barcelona. Por mi parte, bien está lo que bien acaba, y la continuidad de Mario es objetivamente positiva para el equipo, un cupo nacional versátil, de gran talento y en su prime. Tampoco estamos en el Madrid para hacerle a nadie la prueba del pañuelo, que la historia de la sección se construye sobre jugadores que odiaron al club antes de vestir de blanco. Petrovic o Rudy, sin ir más lejos. Entenderéis que no haga ascos a un jugador top Euroliga por haber coqueteado con el Barca.

Ahora bien, tenemos ojos, y desde la afición, el vestuario y el propio club se ha asistido atónitos a los giros copernicanos de opinión del jugador durante las negociaciones. Veo a no pocos madridistas todavía cortocircuitados, en estado de negación al descubrir que su jugador favorito de la plantilla no era un ser de luz y un merengue irredento sino un profesional con sus dudas y bandazos, que negocia a varias bandas y se deja querer desde distintos frentes… Uno de ellos el Barcelona, con quien acordó en pleno fragor de la competición una oferta concreta, que se hubiera presentado a la ACB en caso de que el Madrid le hubiera incluido en derecho de tanteo. Un documento que el propio agente de Mario, seguramente a iniciativa propia y por despecho, se encargó de filtrar el viernes a los cuatro vientos.

¿Existe ese documento? Con estos ojos he visto un extracto, que me ha llegado de una fuente fiable. Así que sí, existió, salvo que alguien se tomase las molestias de falsificarlo, firmas incluidas. Algunas fuentes apuntan a una fecha de caducidad en el precontrato con el FCB, ese extremo lo desconozco.

El giro de guión: las declaraciones

Hezonja parece que no dejó de negociar con el Madrid mientras negociaba con el Barca, algo totalmente lícito y verosímil, aunque nos cueste procesarlo por prejuicios futboleros.

Visto desde fuera, se intuye también una ruptura de la unidad de acción entre el jugador y su representante, un abogado griego outsider. Como si llegado cierto punto Mario se hubiera independizado del agente para negociar personalmente con “los corbatas”. Y cuando eso pasa y se reduce el número de intermediarios, los acuerdos se suelen alcanzar mucho más rápido, como parece que ha sido finalmente el caso. A falta de conocer las cifras del contrato, asumo que estarán más cerca de la última oferta del club que de la posición de máximos del jugador. ¿Por qué? Mario y su agente habían jugado a muchas bandas en los últimos meses pero se acabaron quedando prácticamente sin cartas, una vez el Barcelona se retractó de su oferta y el PAO retiró la suya tras ganar la Euroliga. La NBA sonaba a farol y la alternativa más creíble era Partizán, un destino de calibre muy inferior.

Prometí comprarme la camiseta de Hezonja si renovaba y mantengo mi palabra, solo que por recomendación de mi cardiólogo entenderéis que lo posponga hasta el anuncio oficial.